Según estudios,  se encontró que los nutrientes se reducían en aquellos productos que estaban congelados o habían pasado 5 días desde su consumo. Curiosamente, los productos congelados tenían una mayor cantidad de nutrientes que aquellos que pasaban 5 días estando en la nevera.

Se dictaminó, que el tiempo que llevaba un alimento sin ser consumido, estaba relacionado con una pérdida de valor nutricional. Pero, las diferencias entre los productos frescos y congelados, no son casi apreciables en contra de lo que se puede pensar. De hecho, las diferencias más grandes se encuentran cuando llevan 5 días en la nevera.

Por otro lado, no se apreció ningún tipo de diferencia al analizar estos niveles en frutas y verduras congeladas, refrigeradas, o frescas:

  • Ácido ascórbico
  • Trans-beta caroteno
  • Folato

Básicamente, el estudio nos indica que el método de congelación de los alimentos, puede ser muy positivo para poder disponer de productos de alta calidad nutricional sin que pierdan sus propiedades. Especialmente, en los dos casos analizados en este estudio: frutas y verduras.

No obstante, y contra lo que se pudiera llegar a esperar, el peor método es el de dejar los alimentos en la nevera a la espera de que éstos sean consumidos. No es un mal método de preservación, pero, es menos eficiente que la congelación a la hora de mantener los nutrientes vigentes en una pieza de fruta o verdura.

Sea como sea, es mucho mejor comer frutas y verduras frescas refrigeradas o congeladas que no comerlas.

Fuente: https://ejerciciosencasa.as.com