No dejes de comer carbohidratos– Si lo hacer corres el riesgo de aumentar de peso fácilmente. Puedes consumir pan integral.

 

Haz ejercicio de abdominales necesarios – No te mates haciendo cientos de abdominales diarios. Eso no te hará ninguna diferencia. Cuando sientas el dolorcito en el abdomen puedes pausar y volver a hacer unos pocos más.

 

No dejes de comer– Eso no te ayudará a aplanar el abdomen, solo hará que bajes de peso.

 

Haz ejercicios cardiovasculares– Estudios demuestran que son la mejor manera de reducir el abdomen. Correr es una buena opción.

 

Dieta en fibra – Es lo más recomendable para lograr ese abdomen deseado. Lo encuentras en frutas, vegetales y granos. Éstos te ayudarán a reducir la cantidad de grasa acumulada.

 

Elimina los refrescos y jugos- Al consumirlos ganas más de 70% de grasa abdominal.

 

Duerme entre 6 a 7 horas diarias- Si duermes menos de 5 y más de ocho corres el riesgo de tener más grasa en el abdomen, según un estudio del diario médico, “Sleep”.

 

No dejes los pecados– De vez en cuando puedes comerte esos chocolates que tanto te gustan, no los abandones, solo consúmelos con moderación.

 

 

Referencia: www.primerahora.com